Llévame a esa frontera
de libertades soñadas,
con crepúsculos sin sombras,
Ilusiones y esperanzas.
Donde reviven los sueños
pintados con lunas blancas
de nácar y terciopelo
en las fuentes azuladas.
Llévame rasgando el velo
que cubre toda nostalgia,
y despeja los temores
que hoy envuelve mi añoranza.
Que voy buscando en tu pecho
el abrazo con mil ansias,
y acaricien tus ternuras
la entretela de mi alma.
Llévame por las veredas
por donde corren las garzas,
en los pastos y en los juncos,
y azucenas perfumadas
por el aliento del viento
cuando viene a visitarlas,
envuelto en azahares…
que le robó a las guirnaldas.
Dolores, mi querida amiga
ResponderEliminarTu poesía es bellísima, plena de ternura, te felicito con el corazón
Un abrazo amiga